Mientras van llegando los asistentes, en el ordenador de Marisa suena In the mood for love (traducido como “Deseando amar”, “Dispuesto al Amor”, “En modo Amor”). Es decir, esta canción evoca el estado de ánimo que un@ tiene cuando está #OPENTOLOVE.

Es una canción muy apropiada para una primera reunión de análisis detallado, donde tanto los consultores como los usuarios suelen presentarse con una mezcla de alegría, ilusión y esperanza. Por parte de los usuarios, suelen ser empleados muy capaces que llevan años anhelando una modernización en el software de gestión que utiliza su empresa, y depositan una gran esperanza en el proyecto que Marisa lidera.

Hoy la cosa va de Datos Maestros: los productos, los clientes, los proveedores, las tarifas. Comenzando despacito, en plan introducción, pero acabando por entrar a todo detalle. Es la base sobre la que gira toda la funcionalidad de un ERP, así que es importante tenerla muy clara.

Un aspecto que permite que estas reuniones sean muy productivas es la capacidad de abstracción de los participantes. A cualquier consultor con algo de camino a cuestas, le da igual si el producto del que se habla es una silla, un compuesto químico o una válvula. Es un producto que tiene determinadas propiedades, que se compra, se vende, se fabrica, se almacena, se costea, etc., con unas condiciones que se irán acotando con el paso de las reuniones.

Muchas veces lo realmente difícil en estas reuniones es centrar la conversación en esos términos abstractos, para no entrar en detalles que simplemente desvían el foco.

Marisa no tiene tablas, tiene tablones. Así que poco a poco irá plantando esa semilla de abstracción para que poco a poco sus usuarios hablen su mismo idioma. Comienza la transformación de la empresa, por la pieza más importante: sus personas.